martes, 8 de abril de 2008

Ausencia muy prolongada

Ante todo, lo siento por no haber escrito mucho antes. Debe haber sido un poco de vagancia y un poco de estabilidad. Lo primero se entiende claramente :-) . Lo segundo ha sido, digamos que ha sido un poco consecuencia de que ya me he ido asentando y no tengo la sensación de tantas nuevas experiencias en un espacio breve de tiempo.

Bueno, en estas más de dos semanas sin escribir han pasado algunas cosillas. La primera es que ya he acabado el mes de enseñanza. En concreto el viernes. Ahora mismo ya estoy desde el lunes (ayer) trabajando en un proyecto. El cliente con el que estamos es una compañía noruega llamada Ventelo y Síminn. Es un cliente nuevo y la historia es que se quiere hacer una fusión de varios sistemas existentes. La verdad es que no sé muy bien cómo va la historia de este cliente, ya que si en un momento me dijeron que el cliente era éste, tengo mis dudas desde hoy. Estas dudas se derivan a que al parecer tenemos que ir dos días a la semana (más o menos, es variable) a trabajar en unas oficinas que tiene Síminn (compañía islandesa) en el centro de Copenhague. Lo cuál viene bien para cambiar de aires y todo eso. Además tienen Coca-Cola, la auténtica y no un refresco de soda con sucedáneos.
Mis nuevos compañeros son todos daneses (lo cuál estará bien cuando haya aprendido a hablarlo. La próxima semana tengo entrevista con un consejero de la academia de danés de mi Kommune). Dos de ellos eran los que formaban el grupo de I+D de la empresa (guau, nunca un departamento dió tanto de sí) y otro es uno que empezó hace unos meses con pintas un poco friki (la verdad, es que la mayoría de los daneses visten elegantemente, este parece que no hay moda que se le resista).

La segunda cosa de lo que quería hablar es de que todavía no tengo tarjeta de crédito (débito). Antes que nada, aquí se utiliza mucho las tarjetas monedero (tipo bonobús en Valladolid) que se llaman Dankort. Bien, al parecer el banco no me la puede dar hasta pasado un tiempo (me han dicho que 6 meses, pero en la última sucursal que estuve me dijeron entre 3-4 meses, vamos, cuando les de la gana). Bien, en teoría me tenían que haber dado una Visa electron, la cuál recibí la semana posterior a semana santa. Pues bien, me tenían que llegar los códigos de la tarjeta a los 2-3 días. Después de una semana me pasé por el banco para que me dijeran que eso no era muy normal y que no la voy a recibir si no los he recibido ya (cosa que estaban en lo cierto, porque no los he llegado a recibir), con lo cuál me cogieron mi tarjetita y me tuve que hacer otra, aparte de que me dijeron que debía poner en la puerta una pegatina con minombre para darle un empujoncito al cartero y que la meta por la rendija de la puerta (no hay buzones, la puerta tiene una rendija para el correo). Espero recibirla mañana. Y también espero recibir los códigos no más tarde del lunes.

La semana pasada estuve cenando en casa de la compañera que había empezado con nosotros también. Bueno, mejor dicho, nos invitó al resto de compañeros principiantes a una cena en su casa con su familia. Por supuesto, llegué tarde. Pero sólo 15 minutos. La razón es que había perdido el bús y tuve que coger el tren. Aparte de que la estación estaba a 15 minutos de su casa andando, tuve que soportar las inclemencias de la lluvia con un día soleado.
Ya en su casa, directamente a la mesa. Me presentó a su marido y sus dos hijos. También estaba Gary (un canadiense) y Jose (portugués) que había venido con su novia. Cenamos pollo con ración de arroz, salsa y ensalada (por supuesto, sin aceite). El postre fue un pastel que había preparado con arandanos que tienen en el jardín. A las 10 nos tuvimos que ir a por el autobús (la cena fue a las 7, una hora muy española) y de vuelta a casa.

Bueno, como última anécdota, me he comprado una bicicleta. Ayer mismo. Tuve que ir a un pueblo al lado de Ballerup a por ella. Realmente, podía haber elegido entre 3 y definitivamente en la calidad-precio, pesó más el precio. Es la típica bici de paseo con 7 marchas que se frena con los pedales. Después de volver del pueblo, pasar por un supermercado para comprar un candado y volver (en verdad cogí el tren y en Copenhague me moví desde la estación de tren más cercana hasta casa, tomando unos 10 minutillos).
La única pega que pude ver es hoy mismo, el sillín no es muy cómodo y me ha sentado bien coger una bici después de tanto tiempo. Ya os pondré unas fotillos de ella en próximas entradas que espero que no tarden tanto como ésta.

Por cierto, están pintando los pasillo de casa y parece ser que las puertas también. Bien, los muy chapuzas han pintado la puerta sin quitar la pegatina con mi nombre, con lo cuál el día que deje este piso quedará un buen contraste entre verde y gris. También los bordes de la puerta están sin pintar, lo cuál no se nota a primera vista pero sí que es llamativo si estás un ratico mirando la puerta. La verdad, es que para algunas cosas no nos sacan siglos de ventaja, sobre todo el "ingeniero" que ha ordenado pintar las puertas.
Sólo falta que mañana quiten la pegatina, pinten la puerta, llegue el cartero y se dé media vuelta. Vamos, viva Picasso.

3 comentarios:

Pablo Rey dijo...

Me parece que estos daneses son un poco raros, ¿Que bici se frena con los pedales? Seguro que vas en una silla de ruedas de esas que se mueven con las manos dando pedales ejjej.

PD: Las 7 es la hora mas española para cenar, sino tiempo al tiempo jajajaj

Alvaro dijo...

Bueno, ya he tenido mi primera mala experiencia con los frenos. Los frenos de por sí, frenan bien. No es como los de mano pero mi bici tampoco es La Espada de Induráin.

Por cierto, no he visto bici de paralíticos pero sí bicis de 3 ruedas en que vas casi tumbado.

Alvaro dijo...

Por cierto, después de informarme. Lo de las bicis es simplemente porque debido a un referéndum que se hizo sobre una ley de automoción, toda persona que quiera tener un coche (ya sea nuevo, de importación, 2ª mano) debe pagar aprox. un 80% del valor tasado del coche en impuestos (para ponerlo en circulación se entiende. Después ya vendrán los que tengas que pagar anualmente por ORA, permiso de circulación,...).